Iba en busca de la loca del muelle y terminé entendiendo por qué ella amaba tanto San Blas…
Lo primero que me gustó fue el trayecto desde Tepic: sólo 62 km por la autopista en muy buen estado. Especialmente porque el día anterior me tocó sufrir la angosta, rústica y llena de curvas carretera Tepic-Vallarta,
En la Tepic-San Blas hay dos casetas, una de 16 pesos y otra de 69.
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Y la emoción de siempre cuando aparece un pedacito de mar…
Lo primero que hice fue tomarme la foto en las letras gigantes y entrar al nuevo muelle para ver la estatua de la loca de la canción de Maná… todo lo referente a eso lo puedes leer en este post.
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Dejamos el nuevo muelle y fuimos a cumplir un antojo: comer el famoso pescado zarandeado de San Blas pero antes unas tostadas de ceviche para aguantar la espera pues el pescado lo eliges y lo preparan en el momento.
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Se nos unió una amiguita con la que compartimos la comida.
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Entrada al restaurante de la playa donde comí el pescado zarandeado:
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Después de comer y de camino al centro de San Blas, una parada obligada es comprar pan de plátano y otras delicias en los locales de la carretera:
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Seguimos rumbo al centro de San Blas, todavía hay mucho para conocer y te lo muestro en el próximo post… y te comprtiré un mapa con todos los puntos mencionados en ambos posts.
Leer: San Blas, Nayarit (Parte 2)
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